Relleno con Ácido Hialurónico
El paso del tiempo es inevitable, manifestándose en nuestro rostro de distintas formas, como son manchas, arrugas, flacidez…
Mucho se ha investigado a lo largo de los años acerca de las mejores técnicas para hacer desaparecer o disimular estos síntomas del envejecimiento y, sin embargo, hay un signo al que a menudo no se le prestado la importancia que requería: la pérdida del volumen facial.
La reposición de volumen facial es una técnica de rejuvenecimiento mediante la cual se reponen los volúmenes que ha ido perdiendo nuestro rostro con ácido hialurónico, llegando a convertirse en un gran aliado de los tratamientos estéticos.
Con este tipo de tratamientos se consigue una piel con brillo, suave, sin imperfecciones y de aspecto natural y rejuvenecido. El principal objetivo de este activo es mejorar la hidratación de la piel, estimular la producción de colágeno, reducir el estrés oxidativo y potenciar la renovación celular.
En definitiva, mejorar el aspecto facial y conseguir rejuvenecer la expresión de la cara.
Tipos de ácido hialurónico:
Podemos diferenciar dos tipos de ácido hialurónico en función de su composición y campo de utilización: el ácido hialurónico reticulado y el ácido hialurónico no reticulado.
– Ácido hialurónico reticulado: se utiliza principalmente cuando se quiere dar volumen, ya que gracias a su alta consistencia y rigidez, permite que perdure en el tiempo.
– Ácido hialurónico no reticulado: se aplica en la mayoría de los casos para aportar una hidratación profunda a la piel.
Los rellenos faciales son uno de los tratamientos estéticos más demandados ya que permiten corregir los signos de envejecimiento a cualquier edad, así como arrugas de distinta profundidad. ¿Quieres estar al día de los últimos avances médicos? Haz clic en el link para estar al día de la actualidad médica: https://excelenciamedicatv.com/